Musikaze.com

» Grupos » Basia Bulat » El Grupo

Regístrate aquí
Basia Bulat

  • Localización: Ontario (CANADÁ)
BIOGRAFÍA

Poco se sabe sobre Basia Bulat, joven ángel caído de London, Ontario (Canadá). Surgida de la nada (quién necesita triunfar con MySpace cuando va sobrado de talento), esta compositora, multiinstrumentista y -excepcional- vocalista se materializa entre nosotros con "Oh, My Darling" (Rough Trade/ Sinnamon Records, 07), apabullante debut de ingrávido folk de cámara, para hacer un poco de sombra a las nuevas damas del folk Nina Nastasia, Joanna Newsom, Julie Doiron o Leslie Feist.

Lo que sobrecoge a la primera escucha de esta formidable ópera prima es la impresionante voz de Basia, la cual remite a la gran Joni Mitchell, a la deliciosa cantante de folk psicodélico Elyse Wenberg o a sus ídolos Jolie Holland, Carly Simon y Ella Fitzgerald (a las cuales añade a Joan Manuel Serrat y Silvio Rodríguez). Una voz espaciosa, carismática y generosa, cuyo trémolo estremece y provoca ataques de epidermis gallinácea. Una voz de propiedades textiles (seda, terciopelo, muselina...) que arropa y enamora irremediablemente al primer contacto.

Luego están las canciones. Confeccionadas e hilvanadas a medida con una formación oportunamente básica (cuerdas volátiles -soberbios arreglos de violines remolinantes-, percusiones versátiles -bongos, batería-, algún piano ragtime, un discreto banjo), estas canciones cargadas de folk, country, northern soul, jazz y, por supuesto, música de cámara, adquieren una total coherencia instrumental y harmónica. Se acercan así a aquellas nuevas 'pequeñas sinfonías a Dios' -tal y como las acuñara Brian Wilson- que, tomando el relevo a Jeff Buckley o Elliott Smith, componen ahora genios como Sufjan Stevens y Andrew Bird. Ahí están 'I Was A Daughter', con sus palmas y sus pizzicati; la épica 'Snake & Ladders' -excelentes tiempos para la lírica- llevada por una batería repicante: todo un hit; el vals marcial y agridulce de 'The Pilgriming Vine'; la bossa de 'Why Can't It Be Mine', que parece transportar a Gal Costa a un claro de arces; o ese desgarrador final de melancolía terapéutica en el que susurra 'A Secret' en tu oído con sus cuerdas vocales bañadas en algún material de muchos quilates. ᅠ

Próximos Conciertos »

(no hay conciertos disponibles)


Noticias »

(no hay noticias disponibles)


Twitter

Facebook