Christian Prommer, siempre ha adoptado un enfoque de jazz a su música: de mente abierta, progresista, moderno y atmosférico. Residente en Munich, dj, percusionista y productor comenzó a experimentar con samplers y cajas de ritmos en la década de 1980, aleccionado por virtuosos pianistas y maestros percusionistas en los últimos 20 años se ha movido entre lo orgánico y lo electrónico, entre el modernismo techno y el sonido "Blue Note".
Con su proyecto "Drumlesson", ha dado un giro completo. Fusionando sus raíces jazz con su amor por la música dance y la electrónica, grabando con un grupo de expertos músicos, en directo, “Drumlesson” comenzó en 2007, con una versión de jazz instrumental de “Strings of life” himno techno de Derrick May. También incluye las versiones orgánicas de los himnos electrónicos de Kraftwerk, Patrick Pulsinger, Josh Wink y muchos más. Los críticos, aclamaron el álbum. Aún más halagador, fue que los propios artistas enviaran efusivos mensajes de apoyo a Christian. "Buen trabajo Sr. Prommer", dijo Derrick May. "Es un honor que se tratarán de forma tan brillante", coincidió Patrick Pulsinger.
Antes de lanzar Drumlesson, Christian trabajó con una amplia gama de artistas, entre ellos: el icono del techno en Múnich DJ Hell, Jazzanova en Berlín y en Viena con Peter Kruder.
Como dj se ha presentado en los clubs y festivales más prestigiosos del mundo: Festival de Big Chill del Reino Unido, Sónar en Barcelona, 10 Days Festival en Gante, Festival Mundial de la gama en Singapur, Crossover Festival de Jazz de Tokio, North Sea Jazz Festival de Rotterdam y el Festival de Jazz de Montreux en Suiza.
En 1995, Christian se unió en Munich a su compañero DJ Roland Appel, para formar el elogiado dúo de drum´n´bass y tech-house Fauna Flash. Editaron dos aclamados álbumes: “Fusión” y “Aquarius”, además de una amplia gama de remixes: “Underwolves”, “Abdullah Ibrahim” y “Minimal Compact”.
Junto con Rainer Truby. Christian y Roland, formaron: Trüby Trío. Una mezcla de jazz latino, electrónica y ritmos rotos, el Trío ha remezclado una galería impresionante de artistas como Nitin Sawhney, Bebel Gilberto, Tiefschwarz, Louie Vega y Señor Coconut. También lanzaron una histórica compilación de la prestigiosa serie “DJ-Kicks” del sello K7 en 2001, seguido de su álbum de debut en 2003 “Elevator Music”.
Poco después, Christian y Roland se asocian con Peter Kruder para formar el proyecto de estudio Voom Voom, lanzando su álbum debut “Peng Peng” a través del sello K7, en el 2006. Christian y Kruder también trabajaron juntos en otras producciones, como el álbum de la banda de Minx Roberto Di Gioia´s Marsmobil.
En 2010, Prommer lanza “Drumlesson Zwei”, una selección nueva y audaz de versiones de jazz. La mezcla musical sigue siendo ambiciosa con un repertorio de versiones de grandes artistas: Carl Craig, Laurent Garnier, Underground Resistance o Jean-Michel Jarre.
Después de una década y una larga historia de amor con la tecnología en el estudio, los álbumes, “Drumlesson”, han ayudado a Christian Prommer a encontrar el equilibrio ideal entre la reproducción y la programación, electrónica y orgánica. Estas producciones le han devuelto de nuevo a su primer amor: la batería. Además de su proyecto “Drumlesson”, Christian ha participado en varios trabajos durante los últimos años, produciendo a Kim Sanders, Marsmobil y “Teufelswerk” brillante álbum de DJ Hell.
Para su último LP :“Alex and the Grizzly”, Prommer se asoció con Alexander Barck de Jazzanova. Reunieron una amplia gama de influencias musicales desde el Jazz, Rave, Detroit, House, Electrónica, Funk o Soul, los dos crearon su propio sonido futurista produciendo un álbum lleno de diversidad y coherencia al mismo tiempo. Con versiones en “Boxer Records” e “International Gigolo”, así como un montón de remixes para artistas como Boris Dlugosch y Timo Maas.
Christian Prommer, además extiende su reputación en la escena difundiendo su propia profunda y ambiciosa visión de la música electrónica. Sus sets de DJ, así como sus nuevos e intensos directos le llevan a clubs de todo el mundo. Desafiando las fronteras tradicionales entre los géneros, siempre está tratando de descubrir nuevos secretos musicales. La permanente fusión de sus raíces musicales y los elementos electrónicos contemporáneos es, probablemente, los principales logros de Prommer.
"Durante años no me sentía conectado con la escena ya que no podía pinchar la música que adoraba”, dice Christian. "Ahora la música electrónica es mucho más interesante para mí. Ya que puedo conectar los dos mundos. En realidad es una combinación perfecta”.
