La combinación voz femenina y masculina siempre ha dado
resultados infalibles. Ahí están June Carter y Johnny Cash, Nico y Reed, Sharon
Robinson y Leonard Cohen…Sweet Oblivion lo saben y juegan muy bien esta baza,
entre otras muchas. Por eso su tercer disco, “The Natural” supone en realidad
un verdadero punto de partida en la trayectoria de esta formación de Getxo
(Vizcaya) liderada por Alfonso Arana (ex miembro de la mítica formación indie
Cancer Moon y también de Cujo) y por Ce (voz y teclados), también encargados de
la composición. La banda toma su nombre del sexto disco de Screaming Trees,
pero va más allá de la etiqueta de country-rock, de la que obviamente también
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La combinación voz femenina y masculina siempre ha dado
resultados infalibles. Ahí están June Carter y Johnny Cash, Nico y Reed, Sharon
Robinson y Leonard Cohen…Sweet Oblivion lo saben y juegan muy bien esta baza,
entre otras muchas. Por eso su tercer disco, “The Natural” supone en realidad
un verdadero punto de partida en la trayectoria de esta formación de Getxo
(Vizcaya) liderada por Alfonso Arana (ex miembro de la mítica formación indie
Cancer Moon y también de Cujo) y por Ce (voz y teclados), también encargados de
la composición. La banda toma su nombre del sexto disco de Screaming Trees,
pero va más allá de la etiqueta de country-rock, de la que obviamente también
se nutren. Su tercer disco contiene singles ideales para dar la bienvenida a la
primavera, como la pegadiza ’You will
miss me when I’m gone’ combinados con composiciones de corte más frágil y
clasicista, como el diálogo de piano y guitarras en ‘Holes’.

Hay novedades en su sonido respecto a sus dos anteriores
discos, “Wasted Lovesongs” (2007) y “Black Sheep Serenade” (2009). Para
empezar, un abandono de la melancolía para centrarse en un pop rock que, aunque
no renuncia al folk ni sus raíces norteamericanas, se nutre ante todo de
melodías puras y brillantes, que vertebran el disco. La banda ya ha confesado
en entrevistas su querencia por las canciones atemporales, las que realmente
pueden ser escuchadas a diez años vista sin que pierdan fuelle. Y las suyas lo
son. Estructuras clásicas e imperecederas y arreglos variados que siguen
aportando buenos resultados en la música: guitarra, voz y teclados vertebran
unas canciones que cuentan con una excelente varita mágica: la de JM Rosillo en
la producción. “The Natural” supone una buena tarjeta de presentación para
quienes aún no han reparado en las virtudes de Sweet Oblivion. Si sus melodías
anteriores eran buenas intuiciones, con este álbum han conseguido ya certezas.