Nacimos, crecimos e hicimos cosas. En algún momento de nuestra vida se nos ocurrió que molaría comprarnos un instrumento, y... bum! Dejamos atrás el bello mundo de los inadaptados para dedicarnos a darle al bombo-caja-bombo-caja y explorar qué ocurriría si a Do le añades Mi y Sol y todo ello lo mezclas con un poco de distorsión. Eclosionamos dentro de un local de ensayo, riéndonos de nuestros problemas y nuestras caras, pero, sobre todo, sudando al calor de las válvulas.